La ministra de Economía ha afirmado que nuestro país volverá a crecer más que la zona euro. Lo ha dicho en el Foro Ibercaja, organizado junto con HERALDO.
Pese a que la coyuntura económica es compleja por la desaceleración mundial y otros riesgos como el ‘brexit’, como ha reconocido José Luis Aguirre, presidente de Ibercaja, la ministra de Economía, Nadia Calviño, ha insistido, en que nuestro país seguirá creciendo un 2,2% de acuerdo a las “prudentes” previsiones de su ministerio, si bien algunos organismos internacionales sitúan ese incremento entre el 2,1% y el 2,5%. En cualquier caso, ha dicho, “volveremos a crecer más que en la zona euro” y por las subastas que hace periódicamente el Tesoro Español “somos el sexto mayor receptor de inversión extranjera” y en “2018 se han llegado a triplicar las cifras de 2017”.
La titular de Economía ha hecho estas declaraciones en el Foro Ibercaja, organizado conjuntamente con HERALDO DE ARAGÓN, donde ha impartido la conferencia ‘Claves de la actualidad económica española: retos y oportunidades’. Situando entre las prioridades del Gobierno español el ajuste del déficit para seguir reduciendo la deuda externa de España, Calviño destacó también la buena marcha del empleo que ha crecido un 3% al tener 566.000 personas ocupadas más en diciembre de 2018 respecto a aun año antes y habiéndose reducido también el paro entre un 5 y un 6% estando actualmente la tasa de desempleo en el 14,5%. Todo esto, recordó, “con una inflación moderada, un superávit de la balanza de pagos y un desapalancamiento del sector financiero” y lo que es aún más importante, subrayó “sin una burbuja inmobiliaria”. Por tanto, indicó Nadia Calviño, “los fundamentos de la economía son muy distintos a los de antes de la crisis”.
“La tendencia sigue siendo positiva”, ha hecho hincpapié la ministra de Economía. Eso aunque hay que corregir cuestiones esenciales como la alta estacionalidad del mercado laboral, su temporalidad y su enorme precariedad, ha advertido. Y para Aragón, ha pintado también una visión muy optimista. “Hay que trabajar duro y aprovechar ese crecimiento del 3% del PIB, medio punto más que la media nacional, para seguir manteniendo con tesón ese buen hacer de los trabajadores y las empresas en esta comunidad que tiene un tejido bastante diversificado donde los servicios pero también actividades industriales como la metalurgia, las manufacturas, la electrónica o la óptica tienen bastante peso”, destacó ante un auditorio lleno de empresarios y representantes políticos e institucionales en un espacio “mágico” como el del Patio de la Infanta de Ibercaja donde reconoció “se hacía algo duro hablar de Economía”.
Mirando al porvenir y citando a un Santiago Ramón y Cajal, de corazón aragonés, la ministra auguró a Aragón un buen futuro al colocarse “de forma privilegiada y encontrar su hueco como plataforma logística y puerta de sectores claves como las renovables, la automoción y el servicio a las empresas”.
En cuanto a las recetas para mantener el crecimiento, la titular de Economía mencionó tres ejes: consolidación fiscal, reducción del déficit y de la deuda; política social para combatir el lastre muy peligroso de las desigualdades y la agenda del cambio con esas reformas estructurales que necesita España como la revolución digital con la formación como base, la transición ecológica y una Administración más eficiente.
En el Foro Ibercaja-Heraldo, la ministra tuvo también palabras para el sector financiero, del que dijo, hemos trabajado para reforzar su estabilidad con un marco de seguridad jurídica y dotando de la máxima protección a los ciudadanos. En este sentido, mencionó la ley del crédito hipotecario que están ultimando o la trasposición de directivas europeas que llevaban mucho retraso como el mercado de capitales y otras normas contra el blanqueo, así como la puesta en marcha de las cuentas de pago. Se refirió también a la creación de un macroorganismo de emergencia y supervisión para prevenir posibles burbujas o grandes riesgos económicos. Nadia Calviño habló también de la necesidad de profundizar y avanzar en la armonización fiscal europea aunque todavía no ha habido acuerdo sobre un futuro impuesto digital y, en general, de la importancia que tiene que “España siga siendo proactiva en Europa remando todos juntos en la misma dirección”.
Sobre si la doble cita electoral puede provocar cierta parálisis en el país, Calviño señaló que no recibe esa percepción por parte de los inversores extranjeros que “tienen una enorme confianza en nuestro país donde se multiplica la apuesta inversora” y ha insistido en que “no ve ninguna perspectiva de particular inestabilidad”.
A la batería de preguntas dirigidas por el director del Heraldo, Mikel Itube, la ministra ha respondido de manera ágil, sin eludir ninguna, ni siquiera la de porqué no va en la lista de candidaturas de Pedro Sánchez: «Tengo un compromiso total con Pedro Sánchez, que en nueve meses ha hecho una labor extraordinaria como presidente y quiero ayudarle. Estoy dispuesta a contribuir donde sea más útil», ha añadido, restándole importancia a no ir en el listado de candidadatos. Cuando Iturbe argumentó que daba la misma respuesta que el ministro de Educación, Calviño se limitó a precisar que habría que pedirle explicaciones a él, pero que su compromiso con Sánchez es total, insistió.
Preguntada por si habría incentivos fiscales para las empresas multiplicadoras de actividad económica, Calviño precisó que «hay ya numerosas exenciones» pero es complejo acceder a ellas y en este sentido, admitió que haría falta «un buen mapa para estructurarlas». Intención del Gobierno, señaló, es el establecimiento de una ley de ‘start-up’, pero «solo la confección del mapa nos lleva un montón de tiempo, pero queremos hacerlo porque el empresario no sabe ni dónde ir a la hora de pedir estos incentivos, y he de decir que lo incluimos en la agenda del cambio con la ministra de Hacienda para enfocarlos todos hacia la innovación».
En cuanto al ‘brexit’, no se atrevió a pronosticar cuándo acabará este proceso, de vital importancia para España como socio fundamental de El Reino Unido. «Tenemos cientos de miles de ciudadanos británicos en nuestro país y españoles allí, por eso siempre hemos apoyado un ‘brexit’ con acuerdo y mientras tanto lo que hemos pretendido es dar apoyo a las pequeñas empresas para que estén preparadas y también ultimar un plan de contingencia en aduanas por si al final se impone el ‘brexit’ duro refrorzando los controles de frontera y todo el fitosanitario para que no haya rupturas de stock».
Además, la ministra hizo un llamamiento a construir Europa, ya que «el Viejo Continente está en una encrucijada» con las heridas todavía abiertas de esta crisis terrible que ha sufrido y la desconfianza de parte de los ciudadanos que no se han recuperado, lo que ha llevado al resurgir del proteccionismo y los nacionalismos. Sobre este punto, añadió, que ahora más que nunca cabe plantearse si queremos una Europa progresista que luche contra el cambio climático y que lo lidere o una Europa que involucione. «Espero que se apueste por una Europa que pueda liderar porque es el mejor lugar del mundo para vivir y que ese liderazgo nos permita encauzar los procesos que tenemos por delante».
Respecto a si es sostenible el Estado del bienestar, la titular de Economía desctacó que «la sanidad y la Seguridad Social son nuestras joyas y gracias a ellas nuestros mayores tienen una situación con la que no habrían soñado hace 40 años». Por eso, abundó, «hay que proteger el sistema para poder tener pensiones dignas ahora y dentro de 20 y 40 años para que nuestros hijos y nietos se puedan beneficiar». La solución, añadió, pasa «por tocar distintos palos como subir los sueldos tanto el Salario Mínimo Interprofesional como el de los funcionarios para tener mayor cotización, mejorar la calidad del empleo, tratar de preservar la hucha de las pensiones e implicar a todos los partidos políticos porque en las pensiones todo debe hacerse por consenso.
Por último, la ministra apeló a la necesidad de elaborar un Estatuto de los Trabajadores del siglo XXI con participación de todos los agentes sociales y seguir impulsando el crecimiento de las empresas a base de innovación y el apoyo a la iniciativa ‘España nación emprendedora’ con la licitación del 5G y el apoyo a la implantación de tecnologías como el ‘blockchain’, la Inteligencia Artificial o el ‘big data’.